El Halel Cantado por David Gozlan
El Halel es un compendio de Salmos que relatan la Grandeza de Dios. Fueron escritos por David HaMelej (El Rey David). Podrían ser integrados en siete festividades judías que la Torá ordena.
Sin embargo, algunas de estas fiestas restringen las alabanzas por ser días de juicio, tal como explican los sabios en la Guemará (Tratado de Eruvin 10b).
Halel o Hallel, o Hal-Hel es la fonética de la palabra hebrea הלל cuyo significado es Alabanza.
Las raíces del Halel
El origen del Halel surge de la parashá Emor (porción de la Torá). En ella se nos ordena alabar y agradecer a Dios. ¿Qué nos motiva a realizar esta teshuvá?
Es nuestra obligación expresar nuestra gratitud, no porque aquel a quien expresamos nuestra gratitud lo exija, sino que debemos hacerlo si realmente percibimos al otro como nosotros mismos.
Qué salmos componen el Halel
Los salmos Halel, tal y como son conocidos comprenden desde el salmo 113 hasta el salmo 118, ambos incluidos.
Shabat
El salmo 113 describe la magnificencia del Creador al haber creado la Tierra, el Cielo y darle al vientre la posibilidad de dar vida. Destaca la importancia de santificar el Nombre de Dios.
Así pues, Shabat es la festividad en la cual celebramos la creación tanto del hombre, como del mundo y el Universo entero; así que este salmo corresponde ser orado en Shabat.
Pesaj
En Pesaj tenemos la celebración de la liberación del sometimiento esclavo que Paróh (Faraón) ejercía sobre Am Israel. El Salmo 114 habla sobre la salida de Egipto del pueblo de Israel y los milagros que Dios hizo para Israel en el desierto.
Shavuot
Nuestros sabios dividieron el tercer salmo, el Salmo 115, en dos partes. La primera parte son los 11 primeros versos y la segunda los seis últimos. La primera sección enfatiza el significado de exaltar a Dios y evitar los ídolos que no pueden oír, hablar o ver.
Enfatiza el significado de temer a Dios, adherirse a Él y poner la confianza en Él. Como resultado, la primera parte del Salmo 115 alude a Shavuot, el día en que conmemoramos la recepción de la Torá.
Rosh Hashanah
La segunda mitad del Salmo 115 comienza con la afirmación de que Dios nos ha recordado y termina con la afirmación de que Dios ha dado la tierra a los humanos, que los muertos no pueden alabar a Dios y que sólo nosotros podemos hacerlo durante este tiempo.
La fiesta de Rosh Hashanah es la coronación a Dios como Rey. Recordamos que Él creó el Cielo y la Tierra, y que todos nuestros actos dependen de Él, ya que es la fuente de nuestra vida y de todo lo demás.
Sin embargo, es un día en el que no sólo se nos recuerda la bondad de Dios, sino que también se nos juzga.
Yom Kippur
La primera porción del salmo 116 está relacionada con la festividad de Yom Kippur, no por una clara conexión entre los temas, sino por la forma en que el salmo ruega a Dios.
Nos recuerda la misericordia de Dios, la Justicia de Dios, la importancia de la oración y el engaño del hombre.
En Yom Kippur, le pedimos a Dios que nos perdone. Recordamos Los 13 Atributos Divinos que lo definen, los más importantes, los cuales son la Misericordia y la Justicia.
Pedimos perdón por nuestras conductas y formas de actuar torcidas y deshonestas.
Sucot
En Sucot celebramos las nubes de gloria y protección en el desierto. Pero también celebramos la próxima llegada de la época Mesiánica, en donde todas las naciones reconocerán en alabanzas a Dios.
Así que Sucot tiene un carácter dual: La relación entre las naciones del mundo y Dios. A la vez, simboliza la relación entre Israel y Dios.
La segunda parte del Salmo 116 representa la gratitud y la alabanza de Israel volviendo a casa. El Salmo 117, por otro lado, representa la aclamación de las naciones al reconocer a Dios.
Sheminí Atzeret
Por último, el Salmo 118. Este salmo menciona la era mesiánica, trata sobre la paz que se alcanzará después de la guerra que ocurrirá antes del Mashiah. Se centra en la salvación de HaShem en lugar de la paz que se ha alcanzado.
Cuándo se recita el Halel
Shabat, Pesaj, Shavuot, Rosh Hashaná, Yom Kipur, Sucot y Sheminí Atzeret son las siete festividades mencionadas en la Torá.
No obstante, solo se cantará el Halel en las festividades de Pesaj, Shavuot y Sucot.
Otra de las ocasiones en la que recitar el Halel es durante la semana de Janucá ya que cada día conmemora el milagro del aceite.
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